ABONADOS DE ACHO
Jorge Luis Pérez
ARTÍCULO DE CARLOS BARRETO EN
ANDRESISTAS ROCA REY
Andresistas y aficionados, estamos y leí un comentario ayer tarde en nuestra página que se calificaba en forma totalmente injusta a nuestra amada plaza, para mí la más linda y una de las de mayor solera del mundo. Nuestra vieja señora está enclavada en un barrio tradicional de Lima, el Rimac, “abajo el puente” como se le
conoce, rodeada de casas muy antiguas habitadas por extraordinarias personas, la mayoría con una relación muy estrecha a nuestra plaza desde desde hace generaciones, allí viven toreros, sus familias y boleteros, areneros, monosabios, vendedores de la plaza, personas que trabajan en los corrales, mantenimiento, etc. muchas personas a la que he conocido en mis 58 años de asistir a mi adorada plaza a la que conozco cada rincón así como la mayoría de sus calles aledañas donde he pasado los mejores momentos de mi vida y conocer a la mejor gente, en el jirón Castañeta frente a la Cecina las casas por la que años nos albergo antes de que abran la plaza y después que se cerraba para comer deliciosos potajes, tomarse un pisco una cerveza, bailar un vals, marinera pero sobre todo hablar de toros, allí se vestian muchos subalternos, picadores, entre varias familias ahí vivían mis amigos “los cañones” personajes que desde generaciones trabajaban en la plaza, hasta ahora son los costaleros que sacan a los toreros a hombros, ahí frente a la puerta de cecina se cuadran los carros de matadores hoy en día e ingresan hasta la capilla en olor de multitud, pero no se les toca, con un gran respeto y con toda la seguridad del mundo, hace años los carros entraban a los patios de sol y ahí los esperaban. Hoy las mayoría de casas fueron demolidas para dar paso a Plaza Vea (supermercado). Luego está el jirón Amazonas donde está la puerta de sol, allí se venden artículos taurinos, sombreros, videos, fotos de toros, carteles y ahora han abierto una puerta al mirador de Ingunza donde han puesto in restaurante que debería mejorar mucho, aparte bodega y restaurante muy antiguo.
Por último el jirón Hualgayoc, donde está la puerta de sombra, el gran museo taurino uno de los mejores del mundo, ahí en todo el frente y hacia el jirón Cajamarca, muchas casas abren sus puertas ofreciendo comida criolla, pisco, vino, cerveza, con ese ambiente único con esa mezcla de olores y de sonidos de música criolla, pasodobles y flamenco. La gente buena, trabajadora, allí como mis frejoles con seco donde el Señor Falcón y su familia, por ahí vende también mi amigo, el famoso “Pescado” sus anticuchos y cerveza, recuerdo tanta gente que ya se fue, con los que aprendí lo poco que se de toros, grandes tertulias que si bien es cierto ya no es lo mismo de antes, hoy se habla menos de toros y se consume más alcohol, sigues encontrándote con grandes aficionados que lo que más quieren es hablar de nuestro arte, hablar de la corrida del día o recordar tantas tardes vividas. En cuanto a la seguridad si vas por las rutas que debes, hay mucho estacionamiento y mucho policía, no te pasa nada, ahora si te quedas hasta tarde y te alejas del perímetro, es peligroso como casi cualquier lugar de una capital de Latam. En cuanto a los toreros, llegar a nuestra plaza , permanecer y luego retirarse es muy cómodo y muy seguro, y la solera es única, Acho es único con sus dependencias, rincones. Los toreros siempre han querido venir a Acho, como dice la cancion “no existe buen torero que a mi ciudad no vino” . El problema no es que algunos toreros no quieran venir, lo que pasa es que ahora hay varios que cortan temporada al terminar la europea y no vienen a América, otra cosa son las empresas, con lo caro que resulta regentar Acho no se puede traer tantos toreros que cobren tanto porque al final esto es un negocio, aunque siempre han venido los de arriba del escalafón con excepción de algunos años del empresario Paredes Cueva y este año que la empresa realmente no ha tenido tiempo suficiente para armarla.
En conclusión, de nuestra “Vieja Señora” nuestra amada plaza es hermosa por todo, incluyendo su barrio rímense, es cierto que han habido planes fallidos de hacer de este hermoso rincón de Lima un lugar monumental con la Alameda de los descalzos, el paseo de aguas y sus antiguas casonas, ojalá se concrete, pero decir que el barrio es “malandrino” es totalmente falso e injusto, seguro fue un lapsus, pero mientras viva aquí estoy para amarte y defenderte mi amada plaza de Acho.
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