Fuente; Revista Fiesta Brava
𝐑𝐎𝐂𝐀 𝐑𝐄𝐘 𝐀𝐑𝐑𝐎𝐋𝐋𝐀𝐃𝐎𝐑
𝐅𝐈𝐍𝐈𝐓𝐎, 𝐃𝐔𝐄𝐍𝐃𝐄 𝐏𝐔𝐑𝐎
𝑮𝒓𝒂𝒏 𝒕𝒂𝒓𝒅𝒆 𝒅𝒆 𝒕𝒐𝒓𝒐𝒔 𝒆𝒏 𝑳𝒂 𝑬𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂𝒏𝒛𝒂. 𝑫𝒐𝒔 𝒄𝒐𝒏𝒄𝒆𝒑𝒕𝒐𝒔 𝒅𝒆𝒍 𝒕𝒐𝒓𝒆𝒐 𝒚 𝒖𝒏𝒂 𝒔𝒐𝒍𝒂 𝒗𝒆𝒓𝒅𝒂𝒅: 𝒍𝒂 𝒇𝒊𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒏𝒐 𝒎𝒖𝒆𝒓𝒆 𝒚 𝒆𝒔𝒕á 𝒎á𝒔 𝒗𝒊𝒗𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂.
𝗗𝗲𝘀𝗱𝗲 𝗟𝘂𝗿í𝗻, 𝗟𝗶𝗺𝗮, 𝗰𝗿ó𝗻𝗶𝗰𝗮 𝘆 𝗳𝗼𝘁𝗼𝘀 por: 𝗝𝘂𝗮𝗻 𝗠𝗲𝗱𝗿𝗮𝗻𝗼 𝗖𝗵𝗮𝘃𝗮𝗿𝗿í𝗮.
Corrida goyesca con atuendos decimonónicos, color, sabor y aroma toreros, en una tarde donde sólo faltó el fulgor del astro rey para coronar una jornada inolvidable por la categoría de los alternantes, y las imágenes únicas e irrepetibles obsequiadas por estos grandes exponentes de la tauromaquia contemporánea.
Finito, el rey del duende, y Andrés, el rey del toreo, confluyeron enLa Esperanza, ante una legión de seguidores que abarrotaron el pintoresco recinto en las afueras de Lima. Tres mil almas que salieron toreando con la ilusión de volver.
A primeras, el gran Fino no encontró toro. El de Vellosino se le quedaba corto y su segundo, de Santa Rosa, tampoco tuvo fuelle ni clase, pero Juan Serrano sin apretarse, claro está, se las arregló para encandilar a los pagantes.
Y por arte de birlibirloque, se los metió en la canasta. Aquellos silencios nos hicieron recordar a los de Acho. Y los olés, brotaron cuando Finito se rompió, entregado a esa forma tan única y personal de expresar y sentir el toreo.
El cenit llegó con "Republicano", del Olivar. Noble y enclasado ejemplar que permitió al de Córdoba hacer el toreo de pellizco, brotando el duende en su toreo a la verónica y en los quites que arrancaron sonoros y profundos olés.
Tras ello, las series con la derecha rematadas con trincherillas mágicas, y los muletazos a ralentí arrematados por abajo, fueron de clamor. Era Finito redivivo...!
En la otra orilla, Roca Rey hizo estallar la plaza con su toreo de entrega y pundonor sin límites. Siempre variadísimo, no da tregua a los toros, y cuando intentan rajarse, pone la carne en el asador a ver si se le resisten.
Su primero casi lo caza al torearlo de rodillas en los medios. Y
cuando buscó el abrigo, expuso los muslos y sentó superioridad. El cuarto tampoco quería, pero lo obligó extrayéndole la poca raza que traía, en muletazos de mano baja y en su máxima extensión, abrochando con luquesinas que resultaron vistosas por aseadas.
El sexto tampoco trasmitía. Todo lo hizo él con entrega y honestidad al límite, arrimándose y robando muletazos al de Vellosino, dócil y desrazado, apuntalado por la casta y raza del torero limeño.
Con los tres, Roca Rey estuvo hecho un cañón con la espada, cayendo en total cuatro orejas que paseó entre el clamor de la gente y le franquearon la puerta grande del pequeño nuevo coloso limeño.
Los Ratas destacaron en la brega, y en banderillas El Cebolla y Dennis Castillo, que se desmonteraron en el cuarto y sexto respectivamente. Los de a caballo castigaron medido, por la casta, muy justita, de la corrida en conjunto.
Ficha. Sábado día 20 de noviembre de 2021. Tercera corrida de abono de la Feria de La Esperanza. Tarde nublada, plaza rayando en lleno. Reses españolas de El Vellosino, primero y sexto; El Olivar, segundo y quinto; y Santa Rosa de Lima, tercero y cuarto, en general terciadas y de variado juego. El quinto del Olivar, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Resultado Artístico: FINITO DE CÓRDOBA, pinchazo, estocada delanterilla y desprendida, saludos. Pinchazo, estocada delantera y caída, ocho descabellos, palmas. Tres cuartos de estocada contraria, cuatro descabellos, vuelta al ruedo. ROCA REY, estocada delanterilla, dos orejas. Estocada delanterilla, oreja. Estocada delantera, oreja.
Fuente; Revista Fiesta Brava
𝗗𝗲𝘀𝗱𝗲 𝗟𝘂𝗿í𝗻, 𝗟𝗶𝗺𝗮, 𝗰𝗿ó𝗻𝗶𝗰𝗮 𝘆 𝗳𝗼𝘁𝗼𝘀 por: 𝗝𝘂𝗮𝗻 𝗠𝗲𝗱𝗿𝗮𝗻𝗼 𝗖𝗵𝗮𝘃𝗮𝗿𝗿í𝗮.